Los ladrones han encontrado la puerta de radiología abierta
- Los ladrones pudieron entrar a través de los vestuarios y no forzaron la entrada.
La banda organizada que robó siete sondas de ecografía, valoradas en 42.000 euros, no tuvieron de forzar ninguna entrada porque accedieron a través de los vestuarios del servicio de radiología del hospital.
El modus operandi del robo no fue demasiado complicado para el autor o autores, la puerta de acceso a la sala donde estaban los ecógrafos tenía de estar cerrada, pero fuentes próximas al caso informaron que se encontraba abierta.
Según fuentes policiales la prueba más evidente es que se trataba de un robo por encargo, es que sólo cogieron las sondas de los ecógrafos de la marca Toshiba, el resto de sonadas de otras marcas las dejaron. La operación para extraer las sondas fue rápida, cosa que hace pensar que ya que conocían el sistema de anclaje.
La falta de incidentes, el primero en treinta años, en el Hospital Nostra Senyora de Meritxell provocó que las medidas de seguridad no fueran de lo más estrictas. El hospital solo cuenta con un guarda de seguridad que controla las distintas cámaras del centro a través de unas pantallas de televisión, pero nada inusual le alertó. Fuentes próximas al caso indicaron que el material robado puede caber en una mochila o también esconderse en una barriga ficticia de una mujer y hacerse pasar por embarazada.
La policía confirmó que la investigación sigue abierta y apuntaron que es muy probable que el rotatorio lo haya cometido una banda organizada. Remarcan que es muy improbable que el material robado siga en Andorra, por este motivo confían con la colaboración de la policía de otros países.
Instrucciones para aumentar la seguridad.
El robo de las seis sondas de ecografía supone un cambio en las condiciones de seguridad del hospital. No se trata de un cambio radical, pero si del establecimiento de diferentes protocolos para evitar que se vuelvan a producir los hechos delictivos como el del sábado de la semana pasada.
En la comunicación interna enviada a los trabajadores se ha especificado;
- Han de quedar cerradas todas las puertas durante los horarios en los que no haya actividad.
- Se esté atento a la presencia de personas en áreas que no les corresponde.
La dirección del centro ya había empezado un plan para aumentar la seguridad con la implantación de tarjetas para los trabajadores que marcaran el horario de entrada y de salida. Pero los responsables del hospital no quieren que el rotatorio signifique un endurecimiento muy grande de las condiciones de seguridad que acaben siendo una molestia para el personal y los pacientes.
El establecimiento de protocolos se considera suficiente, siempre que no empiecen a suceder nuevos incidentes en el centro.
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